¿Cuál es la forma correcta de ponerse el sujetador?
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¿Sabías que el ritual que sigues a la hora de ponerte el sujetador influye en su vida útil? Aunque sea un aspecto al que quizá no le hayas prestado suficiente atención, en este artículo te contamos por qué debes fijarte y cómo debes hacerlo.
Cómo abrochar el sujetador sin dañarlo
La mayoría de nosotras llevamos tanto tiempo usando sujetador que lo colocamos de forma instintiva, sin darnos cuenta de la manera en que lo estamos haciendo.
Se ha observado que muchas mujeres, en un intento de facilitar el proceso de cierre, giran el sujetador y lo abrochan desde la parte delantera. De esta forma, cuando lo colocan en la posición definitiva ya está abrochado. Lamentamos comunicar que esa forma es peligrosa para los tejidos y daña la prenda.
¿Por qué? Porque, al estirar la tela, podemos dar de sí los elásticos, hacer que salte algún punto de la costura o incluso dilatar el sostenedor. Al deformarlo, iría perdiendo sus propiedades poco a poco y no aposentarse de la forma correcta sobre el cuerpo.
Entonces, ¿cuál es la mejor manera de cerrarlo? Lo ideal es hacer coincidir los ganchos en la propia espalda, pues es la forma definitiva de llevarlo. Algo que puede ayudar es inclinarse un poco hacia adelante para no tener que elevar tanto los brazos.
Con todo y con eso, hay mujeres que tienen problemas de movilidad o salen de una operación que les impide colocarse de esa forma. Y en ningún caso deben forzar la postura solo por colocarse el sujetador.
En esos casos, lo mejor es optar por un sujetador de cierre delantero. Aquí dejamos el enlace a algunos modelos especialmente diseñados para ellas.
Si sigues estas recomendaciones, lucirás el sujetador en perfecto estado durante más tiempo.